Os voy a recomendar un libro, pero sobre todo a un autor:
Ramón Campayo. Campayo ha debido romper, al menos una vez, la mayoría de records que existen sobre memoria. En 2003, por ejemplo, en menos de una hora logró conquistar 15 récords mundiales. Es capaz de memorizar listas de decenas de miles de palabras, recordando la posición de cada una de ellas. Aunque según el propio Campayo, las pruebas de memoria de fondo, es decir, las que consisten simplemente en memorizar grandes cantidades de datos, no tienen ningún mérito. Para él, el verdadero reto son las pruebas de velocidad. Por ejemplo, memorizar números de 17 dígitos mirándolos durante menos de medio segundo. Por eso mismo también es un experto en lectura rápida, capaz de leer a velocidades de más de 2500 palabras por minuto (con picos de más de 4000, nada menos). Además también es hipnoterapeuta. Por todo esto puede ser considerado como uno de los mayores expertos en desarrollo mental a nivel internacional.
El libro del que quiero hablaros se titula
Desarrolla una Mente Prodigiosa, y en él se tratan distintos temas enfocados a desarrollarnos mentalmente. Está enfocado principalmente hacia los estudios, pero evidentemente no sólo los estudiantes pueden beneficiarse de ejercitar y potenciar la mente.
Vayamos por partes:
Memoria
En primer lugar Ramón Campayo nos habla de la memoria, de cómo funciona, la memoria a corto, medio y largo plazo, etc. Pero lo más importante, nos habla del tipo de información que podemos memorizar: los datos. Distingue entre dos tipos de datos:
secuenciales, que son los que podemos memorizar usando la lógica y el razonamiento –como el argumento de una película, o el transcurso de un conflicto histórico–; y en segundo lugar los
datos puros, que no siguen ninguna lógica –como los nombres de los personajes, fechas históricas,...–. Es importante saber distinguir estos datos porque para su estudio y memorización son necesarias técnicas distintas.
Por ejemplo, los datos secuenciales son fácilmente memorizables por repetición. La prueba está en que si ves la misma película un par de veces en el transcurso de 15 días, eres capaz de recordar prácticamente toda la secuencia de escenas. Fíjate que no he dicho ver la película dos veces seguidas –lo cual saturaría tu mente y no serviría para nada–, sino dos veces en el transcurso de dos semanas. Hay que saber estudiar correctamente usando la repetición, y eso es algo que también enseña Campayo.
El segundo tipo de datos, los datos puros, son muy difíciles de memorizar directamente. La repetición no es una buena estrategia de estudio con estos datos, ya que al cabo de poco tiempo se van a olvidar. Con este tipo de información hay que usar las conocidas
asociaciones inverosímiles. El libro dedica un capítulo completo a este tipo de técnicas, que son similares a las de mi propio
libro, con algunas diferencias muy sutiles. Además, al final de este capítulo Ramón propone una genial forma de ampliar los
casilleros mentales –lo que yo llamo
palabras claves en mi libro– mediante lo que él llama
situaciones comodines. Es decir, usando las 100 palabras claves o casilleros mentales que ya conoces, y combinándolos con las situaciones comodines puedes conseguir memorizar ¡cientos de miles de datos! De esta forma la capacidad de memorización prácticamente no tiene límites.
Lectura rápida
Otro de los aspectos importantes en los que Ramón Campayo hace hincapié a la hora de mejorar los estudios, es la lectura. Es evidente que un estudiante necesitará menos tiempo de estudio si es capaz de leer el temario 4 veces más rápido. Para Campayo, además, es muy importante el tiempo libre que conseguimos con el correcto uso de las técnicas de estudio. En uno de sus vídeos comenta que si un estudiante dominara las técnicas de memorización básicas podría ir memorizando en clase a medida que el profesor imparte la asignatura, y en casa solamente tendría que repasar. También aprender a leer más rápido desarrollará nuestra retentiva, y nuestra velocidad de procesamiento mental.
Volviendo a la lectura rápida, en el libro se explican los fundamentos básicos de la lectura fotográfica, y sobre todo, los malos hábitos que nos hacen leer tan despacio –como ir repitiendo lo que leemos en nuestra mente–. Lo mejor del libro es su aspecto práctico, pues cada técnica nueva que enseña viene acompañada de ejercicios con los que vas comprobando la verdadera eficacia de lo que vas aprendiendo. Y eso te motiva para seguir aprendiendo y aplicando los métodos explicados.
Sistema general de estudio Ramón Campayo (SRC)
Así llama Campayo a su metodología de estudio y es este el meollo del libro. Aquí aplicarás las técnicas de memorización y lectura aprendidas anteriormente. En primer lugar el sistema te enseña como organizar el temario antes de atacar su estudio. Esto incluye varios tipos de resúmenes, subrayados de títulos con distintos colores, adaptaciones del temario al examen, mapas mentales, etc. Luego viene la memorización en sí. Todo esto se resume en tres fases:
- Confección del resumen personal
- Memorización
- Repaso
También incluye un ejemplo completo, aplicando estas tres fases a un temario inventado.
Hay un capítulo sobre tipos de exámenes –desarrollo, tipo test, orales–, y discute las mejores estrategias para abordar cada uno de ellos. Me parece bastante interesante el apartado de
Intuición en las respuestas en el que explica cuándo y cómo arriesgarnos a usar la intuición en los ejercicios tipo test, y en si debemos corregir estas respuestas en un repaso posterior.
Muy interesante es también el capítulo dedicado a consejos generales sobre el estudio: tiempo de dedicación, descansos, el acondicionamiento del lugar de trabajo, etc. E incluso consejos para el día del examen: desayuno, qué hacer en caso de accidente de camino al examen, incluso dónde sentarnos a la hora de hacer la prueba. En un pequeño capítulo también nos habla sobre salud y nutrición para favorecer la memoria.
Desarrollo personal
La última parte del libro está enfocada al aspecto psicológico en la preparación para los exámenes, aunque es aplicable a cualquier situación en la vida. Uno de los mayores problemas que tiene un estudiante a la hora de afrontar el estudio para un examen es el miedo al fracaso. Este miedo se transforma en nervios, que atacan en dos fases muy importantes: el estudio y el momento del examen. El inconsciente no trabaja bien bajo la presión del estrés, y de ahí vienen los famosos momentos de pánico cuando te dan la hoja del examen y tu mente se queda absolutamente en blanco. Uno solo tiene que relajarse en ese momento para que el inconsciente se desbloquee y las ideas fluyan de nuevo. Muchos dirán que relajarse no es tan fácil, y puede que sea cierto, lo que hace mucho más importante una buena preparación psicológica mucho antes del examen. Ejercitar la relajación, mejorar nuestra autoestima, cambiar la percepción y las creencias que tenemos acerca de los resultados posibles y sobre nosotros mismos,... Todo esto es tan importante o más como saber estudiar o memorizar.
Conclusiones
Este libro es un gran manual práctico para desarrollar lo que yo considero realmente el
poder de la mente. Aunque gran parte del libro está enfocado al estudio y preparación para exámenes, y sobre todo de oposiciones, es un libro recomendado para absolutamente todo el mundo. Además, con los ejercicios, ejemplos y métodos de entrenamiento que propone Campayo en el libro, vas a notar mejoras en todos los aspectos, tanto de lectura, memorización,... e incluso bienestar psicológico.
Este no será este el último libro que comente de Ramón Campayo.